Marc Martí ansía regresar a la competición tras el parón por las ventanas FIBA que paralizó la LEB Oro el pasado fin de semana. El jugador formado en la cantera del Lleida Bàsquet y del Basket Zaragoza, espera con ilusión reanudar la liga este próximo viernes cuando el Liberbank Oviedo Baloncesto visite al Tizona-Universidad de Burgos: “como ya dijo Natxo Lezkano cuando terminó el partido en Valladolid, teníamos esta semana de parón para olvidar el choque y coger fuerzas para lo que viene. Ahora nos toca Burgos, que es cierto que no tendrá ninguna repercusión en términos clasificatorios, pero para trabajar de cara al partido de Coruña nos vendrá muy bien”.

Será un partido sin relevancia para ninguno de los equipos, toda vez que el OCB ya está clasificado para el grupo de los mejores y el cuadro burgalés tendrá que luchar por la permanencia. Pese a todo para Martí: “en este encuentro nos centraremos especialmente en preparar Coruña, para intentar trasladar las buenas sensaciones de estas dos semanas a la pista, y encarar el resto de la temporada con la nota más positiva posible”.

Marc Martí se siente muy a gusto en el Oviedo Baloncesto, sobre todo viendo el notable rendimiento que ha tenido el grupo dirigido por Natxo Lezkano en esta primera fase en la que ya se ha conseguido el objetivo principal de la permanencia con mucha antelación: “la verdad es que me estoy encontrando muy bien. Todo el mundo me ha acogido genial, desde la gente de la ciudad, los trabajadores del club, los entrenadores… y al final te sientes como en casa, que eso te ayuda mucho. El hecho de que al equipo le vaya bien, y de que ganemos, pues es todavía mejor. En este tiempo me he sentido muy querido, y eso es algo que aprecio mucho”

(Noticia: F. Gayo)