Un punto y gracias. El Real Oviedo conseguía un tímido empate en casa ante la SD Ponferradina. Muy atareado estuvo Lunin para evitar la derrota. Por parte de la Ponferradina estaba Yuri metiendo en apuros a los locales. Los azules saltaban al terreno de juego en un campo totalmente vacío y luciendo la camiseta del 94 aniversario del club. Fútbol sin aficionados, algo raro, sin duda. 

Los jugadores del Oviedo se mostraron más seguros en defensa y Ziganda se notaba que iba a por todas con dos delanteros jugando en todo momento. Sin embargo, ni Ortuño ni Rodri fueron capaces de abrir la lata y lograr una victoria muy necesaria. En la segunda parte Ibra y Obeng fueron el recambio ofensivo y la magia creativa corría a cargo del mago del Requexón, Borja Sánchez. 

Acción de Bárcenas que propiciaba un posible penalti

Una oportunidad tuvo Bárcenas por la izquierda de pitar un posible penalti. Finalmente, el colegiado no vio que hubiera mano y el Oviedo se quedó sin una gran oportunidad. El panameño estuvo desaparecido en combate durante todo el encuentro. 

La Ponferradina casi marca gol olímpico por parte de un ex oviedista, Omar Ramos. Tuvieron suerte los carbayones y la cosa no fue a más. Sin embargo, tras una gran intervención de Lunin, el balón se estrellaba en el palo. 

Lunin, un seguro en la portería del Oviedo

En la reanudación de la segunda parte el balón llegaba a Lunin procedente de Sielva que finalmente fue despejado por Arribas que se imponía en la parte baja del terreno de juego con una entrada importante. 

Lunin fue uno de los que más trabajo tuvo para el Oviedo. Yuri y Kaxe le pusieron las cosas difíciles. Incluso vimos el peligro bien de cerca con un gol anulado a la Ponferradina por fuera de juego. 

Una de las ocasiones claras fue un disparo de Bolaño que se marchaba bien arriba. Pese a la entrada de Borja Sánchez, Obeng e Ibra, no fue suficiente para dar un soplo de aire fresco al Oviedo que necesitaba la victoria más que nunca. 

No es fútbol es la liga

En el fondo norte del Carlos Tartiere se podía apreciar una pancarta que decía “No es fútbol es la liga”. Sin aficionados, el fútbol es una cosa completamente diferente. Este año lo que resta de liga será así. Así que de momento, el Oviedo a pensar que en el partido frente al Deportivo. Toca levantar la cabeza y seguir trabajando. 

Consuelo Cuesta.