El Liberbank Oviedo Baloncesto se acerca un poco más a su gran objetivo. El equipo dirigido por Natxo Lezkano sacó adelante su compromiso crucial en Melilla, derrotando a un rival directo que ya queda a dos victorias del equipo carbayón, que además tiene a su favor el basket average con respecto a la formación norteafricana.

Fue una demostración de entereza por parte del equipo ovetense, que dominó gran parte del partido contando con varias ventajas por encima de los 10 puntos. Es conocida la dificultad que tiene el Liberbank para mantener sus ventajas esta temporada, unas rentas que en muchas ocasiones se difuminan como por ensalmo. En esta ocasión, pese a la gran cantidad de tiros libres fallados, el equipo asturiano supo mantener la sangre fría para rematar la faena de la mano de un Micah Speight cada semana más asentado en la LEB Oro.

Por cierto, hablando de bases el Liberbank no pudo contar con el concurso de Harald Frey, dolido de un esguince de tobillo, pero en su lugar salió un destacado Pablo Ferreiro, que ofreció un gran rendimiento en los minutos en los que estuvo en cancha.

El inicio del partido sonrió a los ovetenses, que se fueron de salida 3-11 con 7 puntos seguidos de un motivado Elijah Brown. Pero el Melilla respondió rápidamente con un parcial de 11-0 gracias a los triples del reaparecido Djedovic y Kamba. Precisamente Ferreiro, también desde 6,75, puso el colofón a un primer cuarto de rachas (16-17).

El inicio del segundo asalto tuvo otro color asturiano, pero no el del Liberbank si no el de Javi Menéndez. El naviego, ex del Círculo, sumó 5 puntos seguidos en un tramo en el que el equipo azulino encontró la respuesta de su segunda unidad. Momento complicado, momento para Don Oliver. Arteaga apareció para comenzar a horadar el juego interior local y devolverle el mando del partido al Liberbank. El parcial favorable a los de Lezkano sería de 0-10, suficiente para que el OCB dominase cuando sonó la bocina de fin de primer tiempo con un 33-37 en el numerador.

En el inicio del tercer cuarto el Liberbank repitió renta de 11 puntos (39-50), pero Nedim Djedovic, muy acertado en el triple, protagonizó la reacción melillense (49-52). Saúl Blanco, con un triple, y Kabasélé, con dos tiros libres, estiraron la renta hasta el 49-57.  Arteaga y Blanco aumentaban la ventaja hasta los 12 tantos, máxima renta del partido para el Liberbank.

Todo eran motivos para el optimismo, pero Mathieu Kamba se negó a entregar la toalla, sumando muchos puntos para su equipo. De todos modos, el principal motivo para el sufrimiento ocebista fue el suplicio de los tiros libres: 20/35, hasta 15 opciones desperdiciaron los ovetenses, mientras el Melilla recuperaba poco a poco, apretando la contienda hasta el 70-74 tras canasta de Kamba con 1:52 por delante.

Los fantasmas de lo ocurrido en La Coruña comenzaron a planear sobre el Javier Imbroda, pero Micah Speight se puso el disfraz de “ghostbuster” y con tanto descaro como talento, ejecutó una entrada a canasta resuelta con una bandeja, con apoyo en el cristal, prodigiosa. Luego dos tiros libres de Brown (justicia poética) y un par de buenas defensas resolvieron la papeleta.

Precisamente fue Elijah Brown, con 15 tantos, el máximo anotador del Liberbank, pero el más valorado fue, una vez más, Oliver Arteaga, que sumó 23 de valoración, 14 puntos y 8 rebotes. Otros destacados en el Liberbank fueron Saúl Blanco (13), Micah Speight (10) o el trabajo bajo aros de Hervé Kabasélé (7 capturas). Por parte melillense, los de Alejandro Alcoba dependieron en exceso de la inspiración de Mathieu Kamba (17+9) y Nedim Djedovic (13) con Fede Uclés (12+10) brillando en ambas zonas.  

(Crónica: F. Gayo/Fotos: Melilla Sport Capital)