Tenía una cuenta pendiente el Liberbank Oviedo Baloncesto con el Leyma Coruña. Tras la dolorosa derrota sufrida en Riazor en la primera vuelta, cuando el conjunto ovetense dejó escapar un triunfo que tenía en sus manos. Con el 33-47 del descanso en el marcador de Pumarín el pasado sábado, todo hacía indicar que sería muy difícil tomarse el desquite en esta ocasión, pero el equipo de Natxo Lezkano no entiende de maldiciones ni de misiones imposibles. Con la fe como bandera, el cuadro carbayón remontó en el tercer cuarto con un sensacional parcial de 35-19 para rematar la faena en la recta final del choque.

El rebote ofensivo fue una de las claves del partido, hasta 14 para el Liberbank que superó en esa faceta al equipo coruñés, que no pudo contar con la presencia de su técnico Sergio García por el fallecimiento de un familiar. Por otro lado, la victoria fue el colofón a la actuación de Oliver Arteaga, siempre mágico el center de la isla de Hierro, que cumplía 100 partidos con la entidad de Palmira Villa.

Micah Speight imprimió un ritmo veloz a las acciones de su equipo, que se puso con un 8-3 favorable antes de que Coruña reaccionara gracias a los puntos de Matulionis. Kabasélé comenzó a orbitar por los cielos de Pumarín, machacando un alley-oop de Frey y, a renglón seguido, colocando un soberano tapón sobre el ex Belemene. A 1:30 del final del primer cuarto ingresaba en la cancha Alonso Meana, en el regreso del base gijonés al templo ocebista.

Los triples visitantes pusieron al Leyma con 8 puntos de ventaja (16-24), con especial mención para Dago Peña. Lezkano llamó al orden a los suyos para reorganizar ideas, pero al Liberbank le costaba horrores anotar. Tanto la afición como el banquillo local comenzaron a mostrarse disconformes con la labor del trío arbitral en una fase de claro dominio coruñés, amparado en el tremendo porcentaje desde 6,75: 8/13 en el primer tiempo para el Leyma. Precisamente un triple de Zyle le daba la máxima renta al equipo gallego (23-38).

El juego estaba realmente trabado con mucho contacto en ambas zonas, situación en la que el debutante Lotanna Nwogbo se movía como pez en el agua. El pívot nigeriano despachó una gran actuación en el día de su debut con su nuevo equipo. Un alley-oop culminado por el mismo a servicio de Maiza cerraba un primer tiempo con color coruñés (33-47).

Catorce puntos abajo y un juego denso donde el Leyma imponía su físico, una labor ardua por delante para el equipo ovetense, que se agarró a una fe con la que mover montañas, apoyado por el ánimo de una afición siempre irreductible.

El Liberbank se encomendó a uno de sus faros, uno de los mejores bases de la liga. Micah Speight, que cuando llegó generaba tantas dudas sobre su rendimiento y ahora despierta el interés de muchos equipos de cara a la próxima temporada. El playmaker estadounidense cambió por completo la decoración de partido, revolucionando el ritmo con sus triples y sus asistencias.

Después de un par de técnicas a Lezkano y Nwogbo, Brown entró en erupción con un triple más adicional en falta de Jakstas (56-58). Norélia se unió a la fiesta apoyado en la zona por Arteaga. El viento soplaba, de forma huracanada, a favor del Liberbank, que tras un triple de Peña, logró un parcial de 7-0 para volver a ponerse por delante en el numerador con un triple de Elijah Brown al final de una posesión (66-63).

El último cuarto decidiría el vencedor de una contienda disputada al máximo. El encuentro entró en otra fase adversa para el OCB que durante unos minutos se vio atascado en ataque. Frey, con un triple, recuperó el pulso ofensivo para su equipo, mientras Coruña se empeñaba en darle minutos a dos jugadores que firmaron un decepcionante partido como McGhee y Belemene.    

Maiza respondió con otra bomba de 3 puntos, pero Speight y Frey también tenían la muñeca caliente, al igual que Brown. El base noruego fue determinante en esos momentos calientes, poniendo el 83-77 tras un tiro libre. Zyle sostenía a su equipo, pero la jugada decisiva fue un rebote ofensivo de Marc Martí tras error de Frey en un triple. Llegó el intercambio de tiros libres, el último de ellos del propio ala-pívot ilerdense, para que Pumarín estallase de alegría con el bocinazo final. El todopoderoso Leyma Coruña había caído. Por tanto, el Liberbank comenzará la segunda fase con un balance de 3-5 y todas las ilusiones de jugar playoffs más reforzadas si cabe.

Micah Speight, con 20 puntos, 7 asistencias y 4/6 en triples, fue el mejor argumento ofensivo en el Oviedo, aunque Oliver Arteaga (14 puntos, 12 rebotes y 24 de valoración) fue el más valorado. Además, Elijah Brown (14 puntos y 4/5 en tiros de campo), Harald Frey (11 puntos y 3 asistencias) y Cameron Oluyitan (10 tantos) fueron otras piezas importantes para lograr el éxito.

Por parte del Leyma Coruña, cinco jugadores alcanzaron las dobles figuras en anotación: Zach Monaghan (13), Lotanna Nwogbo (13), Osvaldas Matulionis (10), Gaizka Maiza (10) y Dagoberto Peña (10+5), aunque el equipo dirigido ocasionalmente por Román Gómez echó de menos la aportación de jugadores como Gary McGhee, Romaric Belemene o Javi Vega.

(Crónica: F. Gayo/Fotos: Santiago Cañaveras/OCB)