EL EFECTO PUMARÍN NOQUEA AL LÍDER (88-84)
Sensacional victoria del Unión Financiera, que remontó en los últimos minutos del partido para mantenerse invicto en su fortín de Pumarín.
Unión Financiera Baloncesto Oviedo 88 (19-27-18-24): Dani Pérez (7), Johan Löfberg (19), Manu Rodríguez (14), Drew Windler (15) y Felipe Dos Anjos (12) – cinco inicial – Mouhamed Barro (4), Fabio Santana (7), Miquel Salvó (5) y Carlos Martínez (5).
Actel Força Lleida 84 (20-25-19-20): Luka Rupnik (18), Garrett Nevels (16), Papa Mbaye (2), Gerard Sevillano (2) y Leonardo Demetrio (8) – cinco inicial – Jordi Bergada (0), Miquel Feliu (15), Marc Rubín de Celis (7), Juampi Sutina (10), Alfonso Alzamora (4) y Marc Martí (2).
Incidencias: Unos 1.000 espectadores acudieron al Polideportivo Municipal de Pumarín. El Unión Financiera Baloncesto Oviedo presentó la baja de última hora de Víctor Pérez, que se unió a la de Eduardo Hernández-Sonseca.
Árbitros: Esperanza María Mendoza y Adrián Iglesias. Eliminado por personales Garrett Nevels (Actel Força Lleida).
El Polideportivo de Pumarín es un recinto donde se llegan a vivir auténticas experiencias baloncestístico-religiosas. En los últimos años el pabellón ovetense ha sido el escenario de partidos históricos y momentos infartantes que ya forman parte de la memoria de todos los aficionados. Este fue el lugar donde el Actel Força Lleida fue a enterrar su condición de invicto.
Fue un duelo jugado de poder a poder, con el cuchillo entre los dientes, entre los equipos que viven un gran estado de forma y que deleitaron con un baloncesto fluido y ofensivo a los espectadores. Además la igualdad y la emoción presidieron un choque donde el pase predominaba antes del egoísmo en ambos equipos, que tenían abundantes fuentes de anotación entre sus hombres.
Prueba de la gran igualdad que tuvo el encuentro son las 12 veces que hubo empate en el marcador o los 20 cambios de ventaja en el mismo. Con ese equilibrio permanente ya comenzó el partido de la jornada en la LEB Oro, con un acertado Garrett Nevels, mientras que en el Unión Financiera Baloncesto Oviedo se repartía la anotación.
Los dos brasileños que había en la cancha nos obsequiaron con un intercambio de mates, primero Leonardo Demetrio, luego respondió Felipe Dos Anjos. Un triple de Johan Löfberg y dos tiros libres de Fabio Santana daban una primera ventaja interesante a los locales (19-14), pero la reacción ilerdense sería fulminante con un parcial de 0-6 que cerraba el primer periodo (19-20).
La iniciativa caía del lado catalán con un parcial que se estiraba hasta el 1-10, pero Carles Marco hizo un primer movimiento totalmente acertado al poner a sus dos bases en cancha, solución que repetiría varias veces en el partido ante la ausencia de Víctor Pérez, que obligaba al preparador local a rotar a sus hombres pequeños, haciéndoles jugar muchos minutos.
La respuesta ovetense fue un 11-2 culminado por un triple y un mate de Drew Windler tras robo de Dani Pérez (31-26). Esa sería la máxima ventaja del Unión Financiera Baloncesto Oviedo en todo el partido, lo que da una idea de la dificultad de la empresa solventada por los locales en esta sexta jornada.
Garrett Nevels enganchó una serie de 6 puntos, respondida por el acierto de la mira telescópica de un Manu Rodríguez letal en el primer tiempo. El granadino cuando coge la racha es imparable y ayer cerró la primera parte con 14 puntos y un excelso 4/8 en triples.
El encuentro tenía un ritmo formidable, con dos equipos buscando siempre el pase a un compañero que estuviera en buena posición para que metiera su lanzamiento. Baloncesto de muchos quilates y diversión para los aficionados.
Llegando el final del primer tiempo se produjo una “mala noticia” para los locales, como fue el despertar de Luka Rupnik, que no le había tomado aún el pulso al partido, pero con 6 puntos consecutivos el esloveno se activó para lo que luego sería una exhibición en la segunda mitad. La primera parte se cerraba con un triple de otro “killer”, un infalible Miquel Feliu, que ponía el 46-45 con el que ambos equipos se iban a los vestuarios.
Carles Marco volvía a recurrir a su dupla de bases en pista al inicio del tercer periodo. Garrett Nevels deslumbraba en su presentación en Pumarín con un canastón a aro pasado y un posterior 2+1, antes de meterse en un estúpido rifirrafe con Felipe Dos Anjos, que le desconectaría el resto del partido. De hecho, el escolta estadounidense ya no volvería a anotar.
Dos canastas de Löfberg y un mate de Dos Anjos propiciaban un 6-0 en medio de un ambiente caldeado por la tangana anterior. Pero la igualdad seguía siendo el factor dominante en un choque que cerraba el tercer cuarto con tablas (64-64).
A esas alturas el Unión Financiera Baloncesto Oviedo tenía dos grandes problemas: por un lado, perdía la batalla reboteadora (21-30) y, por otra parte, el conjunto visitante estaba intratable desde la línea de triple (7/11). Por si esto fuera poco, el último periodo arrancó con un momento de desconexión de los carbayones, que encajaron un parcial de 0-10, que obligó a Carles Marco a pedir tiempo muerto con 64-72 y 8:19 por jugar.
Reaccionaron los asturianos a base de triples, Windler y Santana, y salieron de la zona de peligro volviendo a engancharse al partido que ya sería una sucesión de momentos no aptos para cardiacos. En el cuadro de Borja Comenge, Luka Rupnik ya había tomado la responsabilidad y martilleaba el aro local a base de triples.
Su némesis sería un Johan Löfberg inmenso en el rush final del partido, totalmente “on fire”, pidiendo el balón y sintiéndose importante. Un triple de Rupnik ponía el 72-78, pero el conjunto ovetense resurgía de la mano de Dos Anjos, Windler y Löfberg encajando a su rival un parcial de 7-0 que encendía Pumarín (79-78).
El Actel Força Lleida respondía a base de triples (Feliu y otra vez Rupnik), pero en el camino perdía por faltas a un descentrado Nevels. El rebote ofensivo catalán seguía martirizando al Unión Financiera Baloncesto Oviedo.
Carles Marco gastó un tiempo muerto con 1:59 por jugar y el 81-84 en el luminoso. Nuevo ajuste en la estrategia y dos aciertos consecutivos de un inmenso Löfberg, el segundo de ellos un triple que ponía al cuadro ovetense por delante (86-84) con 38 segundos por jugar. El sueco había sumado 8 puntos en los últimos minutos de un duelo electrizante.
En el siguiente ataque falló Rupnik y Papa Mbaye hizo falta en ataque en la lucha por el rebote. Felipe Dos Anjos y Dani Pérez serían los encargados de sentenciar desde la línea de tiros libres. El líder había mordido el polvo y la afición de Pumarín daba rienda suelta a su alegría.
El Unión Financiera Baloncesto Oviedo cerró el choque con un parcial favorable de 16-6 que revirtió el rumbo del mismo. Pese a ser inferiores en el rebote (28-37), los discípulos de Carles Marco equilibraron la balanza con pocas pérdidas propias y muchas ajenas.
Johan Löfberg lideró la anotación local con 19 puntos y 4 rebotes, siendo acompañado por el excelente partido de Felipe Dos Anjos (12 puntos, 7 rebotes y 2 tapones), Drew Windler (15 puntos y 3 triples), Manu Rodríguez (14 puntos y 4 triples) y el mariscal Dani Pérez, firmando una soberbia hoja de servicios con 7 puntos, 3 rebotes y 11 asistencias.
Por parte ilerdense, Luka Rupnik (18 puntos, 5 triples y 4 asistencias) y Miquel Feliu (15 puntos y 3 triples) se quedaron al final muy solos, ya que Garret Nevels (16 puntos y 6 rebotes) se autoexcluyó del partido. Leonardo Demetrio (8 puntos y 4 rebotes) tampoco apareció en el último cuarto.
En definitiva, victoria de prestigio para un Unión Financiera Baloncesto Oviedo que sacó sobresaliente en un partido de los que hacen afición. Los carbayones tienen su próximo compromiso el sábado que viene en la cancha del Cafés Candelas Breogán, antes de encarar dos partidos seguidos en casa ante Magia Huesca y CB Prat.
(Crónica y fotos interiores: Francisco Gayo)