ASTURBASKET PLUS – AIDA PALACIO PONE FIN A SU CARRERA
La lateral ovetense se retira a los 28 años en el club donde todo comenzó para ella.
El duelo del sábado frente al Rocasa Gran Canaria no sólo fue el último partido de la temporada para el Lobas Global Atac Oviedo. Además supuso la despedida de una leyenda del club, Aida Palicio, que a sus 28 años ha decidido dejar la práctica del balonmano.
Aida Palicio comenzó a jugar al balonmano en las escuelas deportivas del Lobas Global Atac Oviedo en categoría benjamín. Fue escalando peldaños en la estructura del club hasta alcanzar el primer equipo, siendo protagonista destacada del salto de calidad del conjunto carbayón, que disputaría tres fases de ascenso consecutivas a la máxima categoría, logrando subir por primera vez a la hoy denominada Liga Guerreras Iberdrola en la temporada 2014-2015.
La lateral carbayona vivió la primera campaña del club en la élite y después emprendió nuevas aventuras, primero de Erasmus en Alemania y luego militando un lustro en el Motive.co Gijón BM La Calzada, con el que alzó la Copa de la Reina. Hace dos años decidió volver a casa y su regreso no pudo ser más exitoso, contribuyendo decisivamente a que el Lobas Global Atac Oviedo se convirtiese inesperadamente en campeón de División de Honor Oro y ascendiese por segunda vez en su historia a la Liga Guerreras Iberdrola, éxito que convirtió a Aida Palicio en la única jugadora presente en los dos ascensos a la élite del club.
En el curso que termina Aida Palicio ha anotado 92 goles entre la fase regular de la Liga Guerreras Iberdrola, el play-down y la Copa de la Reina. Los últimos cuatro tantos los anotó ayer ante el Rocasa Gran Canaria y a la conclusión del partido la lateral ovetense recibió varios reconocimientos como su camiseta enmarcada con el número 2, dorsal que nadie más podrá lucir. Además la vicepresidenta del Lobas Global Atac Oviedo, Paulina Guerrero, le hizo entrega de la insignia de oro del club, máximo reconocimiento de la entidad, por su trayectoria ejemplar para todas las niñas que forman parte de la familia azul y que sueñan con llegar a cotas tan altas como ella.
“Si me quedo con algo de todos estos años es con la cara de ilusión con la que te miran todas las niñas cada vez que te ven, las animo a todas a que sigan disfrutando de este deporte, que es muy bonito”, comenta Aida Palicio. “Todo tiene un principio y un fin y aquí ha llegado mi fin dentro de las pistas, seguiré disfrutando del balonmano de otra manera, seguiré viniendo a animar a estas chicas y pronto este club volverá a estar donde se merece, que es en la Liga Guerreras Iberdrola”, concluye.
(Nota de prensa del Lobas Oviedo)