La situación del Universidad de Oviedo de Liga Femenina 2 ha llegado a un punto en el que se pone en grave riesgo la participación del conjunto colegial en la temporada 2016-17.

Con el inicio de la campaña previsto para el sábado 1 de octubre en la pista del Lima-Horta Barcelona, todos los clubes de ambos grupos de Liga Femenina 2 tienen la obligación de presentar este viernes 23 al menos 8 fichas de jugadoras de la primera plantilla.

En estos momentos, el Universidad de Oviedo únicamente podría cubrir 5 de las 8 fichas necesarias con las dos jugadoras renovadas de la pasada temporada, es decir, Andrea Sierra y Carmen Prieto, más las únicas 3 incorporaciones confirmadas hasta la fecha, que son Raquel Navarro, Rosa Garrido y Cristina Ruiz.

No hay que olvidar que el conjunto ovetense descendió el último ejercicio al quedar penúltimo clasificado en el Grupo A, pero este verano la Federación Española de Baloncesto le concedió una plaza para esta temporada que está a punto de arrancar.

Las expectativas en esos momentos era montar un equipo competitivo para intentar no repetir la mala temporada pasada y poder luchar por la permanencia con ciertas garantías, como así expresaba el entrenador del Universidad de Oviedo, Alberto Fernández-Hevia en una entrevista concedida a Asturbasket el pasado 27 de julio.

Casi dos meses después y pese a las varias opciones de configurar una plantilla competitiva, la respuesta por parte del Servicio de Deportes de la Universidad de Oviedo siempre ha sido negativa, ya que existen todo tipo de trabas administrativas y burocráticas para poder matricular como estudiantes a las jugadoras por parte de la propia Universidad.

De este modo, se persiste en los errores del año anterior pero incluso se empeora la situación hasta el punto de que a dos días escasos para que se produzcan las inscripciones de las fichas de jugadoras en la FEB, el Universidad de Oviedo está en cuadro.

Además el domingo 25 está prevista la celebración de la Copa Principado Femenina en Avilés entre el ADBA y el combinado colegial, encuentro que a día de hoy se puede cuestionar que se llegue a disputar.

Sería muy lamentable que una institución histórica del baloncesto asturiano no permitiera competir a su equipo femenino con un mínimo de garantías e incluso pusiera en riesgo su continuidad en el baloncesto de competición, ya que el resto de competiciones obviamente ya están conformadas.

No olvidemos que el equipo masculino de la Universidad de Oviedo ya dejó de existir hace algunas temporadas y que estamos hablando de una institución señera en el basket de nuestra región con décadas de historia a sus espaldas, que ahora puede vivir sus horas más negras por una pésima planificación.

(Por Francisco Gayo)