La jornada del sábado en el Grupo A-C de Liga EBA había sido propicia para los intereses del Gijón Basket. Las derrotas del Ucoga Seguros CB Chantada y del Porriño Baloncesto Base abrían el camino al conjunto rojiblanco, que parecía renacer de sus cenizas pero todo pasaba por vencer en la tarde del domingo en una cancha maldita, la de Betanzos donde el GB2015 nunca ha vencido y que después de lo ocurrido en esta jornada revalida su condición cargándose aún de más razones.

Pero los gijoneses dejaron pasar el último tren de esta temporada, no es el primero. Es más si estaban en la estación parece que se hubieran quedado dormidos en la cafetería, porque el Santo Domingo Betanzos pasó como un expreso ante sus narices.

El conjunto local, que marchaba antepenúltimo y se jugaba muchas de sus opciones de permanencia, salió mucho más concentrado a la pista coruñesa y el resultado fue demoledor. Al descanso el luminoso reflejaba un 35-16, que dejaba pocas dudas sobre quién era el dominador del partido.

El equipo dirigido por Fran Sánchez firmó un pésimo primer periodo con menos de un punto por minuto, en una pobrísima presentación ofensiva. Por otro lado, los locales mandaban liderados por un Marcos Rozas descomunal.

En la segunda mitad el GB2015 despertó de su prolongado letargo. Los triples comenzaron a entrar gracias al acierto de Diego Sánchez y Fernando Noval (45-37). Pero el Santo no perdió el control del partido con el argentino Franco Bazani dominando el tempo del juego. Un parcial de 9-0 tiraba por tierra el recorte realizado para que la brecha se ampliase hasta el 58-39. De nuevo entre Diego y Noval sumaron 5 puntos que aún dejaba algunas esperanzas de cara al último cuarto (58-44).

Pero no era el día de los gijoneses ni muchísimo menos. Los jóvenes Fall y Traoré infundían mucho respeto en ambas zonas, donde también Pereiro hacía bastante daño. El Gijón Basket se perdía en una interminable serie de intentos triples, ¡hasta 43 sumarían los rojiblancos!

Con 6 minutos para el final el electrónico reflejaba un 65-51. Sin embargo, la hecatombe llegó en tan solo 3 minutos donde se encajó un parcial de 16-2 en pleno festival del Santo. Tan solo la entrada en pista de los suplentes locales y el orgullo de los gijoneses permitió que la renta bajara hasta los 14 tantos finales, una mera anécdota.

Con 8 rebotes menos capturados (31 por 39) y un horripilante 6/25 en tiros de 2 puntos, el Gijón Basket completó unas estadísticas que explican a las claras lo acontecido en tierras coruñesas. Fernando Noval destacó con 29 puntos, 8 rebotes y 6/15 en triples, mientras que Diego Sánchez aportó 17 puntos, 5 rebotes y 4/7 en triples, y Charly Suárez añadió otros 14 tantos aunque buena parte de ellos en la recta final.

Marcos Rozas fue el mejor del partido, sumando 29 unidades, 7 capturas y 12/19 en tiros de campo. Además, en el Santo Domingo Betanzos sobresalieron Willy Pereiro (13 puntos y 5 asistencias), Franco Bazani (11 puntos, 5 asistencias, 4 rebotes y 4 recuperaciones) y Dani Martín (9 puntos y 5 asistencias). Entre Khadim Fall y Souleymane Traoré contribuyeron con 15 puntos y 17 rechaces.  

(Crónica: F. Gayo)