EL ALIMERKA NO CORRIGE SU RUMBO Y SE ESTRELLA ANTE EL TIZONA
Los ocebistas despacharon una pésima actuación en un encuentro en el que apenas tuvieron opciones de victoria. Marc Martí y Demetric Horton fueron los únicos locales en superar la decena de puntos.
Por la calle de la amargura. Así llevó el Alimerka Oviedo Baloncesto a su fiel afición en el duelo del pasado domingo ante un Grupo Ureta Tizona, que llegaba a Pumarín con la vitola de equipo revelación y que a la hora de la verdad hizo honor a la misma.
Por parte local lo que se vio un conjunto sin alma, que entró totalmente desconectado al partido (2-8), aunque de la mano de los puntos de Horton pudo mantenerse enganchado en el primer cuarto (16-13). Joe Cremo ponía el contrapunto encestador por parte de un Tizona, que asestó un parcial de 0-8 con protagonismo para el joven debutante Mario Saint-Supery.
El preceptivo tiempo muerto de Javi Rodríguez dio resultado. Martí se echó el equipo a sus espaldas y un triple de Josep Pérez puso al OCB por delante (31-29). Parecía que el Alimerka había encontrado por fin el camino correcto, pero ocurrió todo lo contrario. Fue Diego Ocampo el que paró el partido y a partir de ahí los ovetenses se apagaron por completo.
Baste señalar el concluyente dato de que en los 23 minutos que quedaban por jugar el cuadro azul tan solo sumó 29 puntos, una cifra ridícula para poder aspirar a tumbar al Tizona. Lo que quedaba de primer tiempo ya fue un anticipo de la debacle que llegaría tras el descanso, al que se llegó con un 34-41 a favor de los burgaleses.
Pero es que el regreso al partido no pudo ser peor para el Alimerka. Dos triples de Pacheco y Jofresa, más una canasta de este último, propulsaron al conjunto castellano hasta una renta de 15 puntos (34-49). Aún quedaba mucho por jugar, pero el Alimerka colapsó por completo, víctima de unos horribles porcentajes de tiro y sin demasiadas alternativas ofensivas. Los ovetenses se empeñaron en buscar constantemente los triples y a Horton y Martí como únicas referencias ofensivas, dejando de lado a otros compañeros.
Tal fue el desaguisado que el segundo tiempo apenas tuvo historia, pues el KO local fue fulminante. Ni siquiera llegó el acostumbrado arreón final, cuando las cosas van mal en un partido en un Alimerka sorprendentemente (para mal) falto de energía.
El OCB firmó un 3/27 en triples y un 13/24 en tiros libres, además de perder claramente la batalla por el rebote (29 por 40). Demasiadas vías de agua para que la nave azul llegara a buen puerto. Marc Martí (16) y Demetric Horton (11+6) fueron los únicos locales en llegar a los dobles dígitos en anotación. Josep Pérez (8), Hall Elisias (7) y Dan Duscak (6) sumaron algo más, pero no fue suficiente. Adrián Chapela no pudo jugar por un golpe en un tobillo, mientras que Davis Rozitis continúa siendo el protagonista de un auténtico expediente X. Reseñar el anecdótico debut en LEB Oro de Alejandro Tirador.
Por parte castellana, destacar los números de Mario Saint-Supery (14), Joe Cremo (12), Gerard Jofresa (10) y David Böhm (8+8). El Tizona logró al final una victoria mucho más plácida de lo que pensaba cuando tomó el autobús rumbo a Pumarín.
Ahora el Alimerka Oviedo encara dos salidas consecutivas, a Melilla y Ourense, antes de un nuevo parón, en esta ocasión por las famosas y pérfidas ventanas FIBA. Habrá que esperar que se vuelva a la buena senda, ya que la tendencia es realmente preocupante. No en vano, los buenos partidos cada vez son menos frecuentes, mientras que los malos abundan últimamente.
(Crónica: F. Gayo)